Cáncer de piel en los gatos: síntomas y tratamiento
Aunque puede ser una noticia devastadora, el cáncer de piel en gatos se puede tratar. La clave es detectar a tiempo las anomalías cutáneas para que tú y tu gato puedan iniciar un tratamiento veterinario lo antes posible.
El primer signo de cáncer de piel en los gatos suele ser un bulto o una protuberancia en la piel. Sin embargo, también puede manifestar otros signos, desde una nueva decoloración hasta una herida crónica en la piel que no cicatriza. Podrías notar estos cambios mientras acaricias o aseas a tu gato. Por eso es importante que los dueños de gatos los acicalen con frecuencia. Te ayuda a establecer un vínculo con tu mascota. Puede reducir al mínimo la producción de bolas de pelo. Además, te permite controlar la piel de tu gato para detectar cualquier problema de salud.
Si encuentras algo que te preocupa, lleva a tu gato al veterinario para obtener un diagnóstico de inmediato. El veterinario podrá determinar si es cáncer, si es maligno o benigno, o si es otra afección cutánea que requiere cuidado. El plan de tratamiento dependerá del resultado de esas pruebas.
¿Los gatos pueden contraer cáncer de piel?
Con todo su pelaje, ¿los gatos pueden contraer cáncer de piel? Sí y la exposición al sol es la causa más común de cáncer de piel en los gatos. Esto es particularmente cierto en el caso de los gatos con pelaje blanco, gatos con pelaje fino y gatos sin pelo, como los gatos esfinge, que son propensos a sufrir quemaduras con el sol.
También existe evidencia de un vínculo entre el cáncer de piel y los gatos que se lamen de forma compulsiva. Sin embargo, muchas veces, la causa es la genética, ya que la predisposición a padecer cáncer es hereditaria.
¿Cuáles son los signos del cáncer de piel en gatos?
El aspecto del cáncer de piel en un gato variará según el tipo de cáncer, pero hay varios signos generales de cáncer de piel en los gatos a los que debes estar atento:
Costras, especialmente en los oídos, la nariz o los párpados
Manchas negras con costras secas en la piel
Piel supurante y en carne viva
Áreas rojas y protuberantes de la piel
Heridas que no cicatrizan
Úlceras
Letargo general
En los casos de carcinomas de células escamosas, los síntomas de la piel pueden empeorar en el verano y mejorar en el invierno. Se recomienda encarecidamente buscar bultos, protuberancias o heridas mediante un aseo regular y un examen minucioso de la piel del gato.
Cuando encuentres un bulto por primera vez, te preguntarás: ¿es cáncer de piel o una verruga? El veterinario podrá decirte. Es por eso que si detectas algo fuera de lo común, debes llevarlo al veterinario para que lo revise lo antes posible. La intervención temprana es la clave para la recuperación.
¿Cuáles son los tipos de cáncer de piel en los gatos?
Existen varios tipos de cáncer de piel en los gatos. Los tipos más comunes son los siguientes:
Melanoma maligno
Los melanomas malignos en gatos se pueden desarrollar en las células melanoma de la piel, es decir, las células que producen el pigmento de la piel. Este tipo de cáncer generalmente se encuentra en las membranas mucosas de la boca y la nariz, pero en casos poco frecuentes puede desarrollarse en la piel. Este cáncer, que probablemente es genético y de rápida propagación, se puede desplazar rápidamente a los ganglios linfáticos y órganos.
Carcinoma de células escamosas
El carcinoma de células escamosas (CCE) es un cáncer maligno de las células de la piel que se produce en la piel dañada por el sol, donde el pelaje es más fino. Puede causar úlceras y costras en los bordes de la oreja, la nariz y los párpados superiores de los gatos. Por lo general, solo afecta un área del cuerpo de un gato.
Mastocitoma
Un tumor de mastocitos (TCM) es un tumor cutáneo frecuente que se origina por un grupo de células inmunitarias conocidas como mastocitos. Estos se presentan como nódulos rojos en la cabeza y el cuello del gato. No todos los TCM cutáneos son malignos. El veterinario puede realizar pruebas y determinar el mejor tratamiento.
Cuerno cutáneo
Un cuerno cutáneo aparece como una estructura similar a un cuerno en la piel. Estos cuernos están hechos de queratina, una proteína que forma el pelo, la piel y las uñas. También se conocen como quistes cutáneos queratinizados y pueden ser malformaciones de los folículos pilosos.
Fibrosarcoma
Los fibrosarcomas crecen rápidamente y se pueden propagar a otras partes del cuerpo. Los tumores originados debajo de la superficie de la piel pueden parecer bultos. Pueden ser causado por un virus subyacente o pueden formarse espontáneamente. Los tumores pueden aparecer en el tronco, las patas, las orejas o en un lugar de vacunación anterior.
Tumores basocelulares
Los tumores basocelulares son lesiones benignas de la capa superior de la piel. El carcinoma basocelular es un tumor maligno. El tumor benigno es común en gatos mayores, especialmente en las razas domésticas de pelo largo, como los gatos himalayos y persas. El tumor maligno ocurre con mayor frecuencia en gatos mayores y las razas persas son propensas. Suelen aparecer en forma de úlceras en la cabeza, las patas o el cuello.
¿Qué causa el cáncer de piel en los gatos?
En gatos blancos, gatos sin pelo y gatos con pelajes finos, la sobreexposición al sol puede causar cáncer de piel. Además, los gatos con afecciones cutáneas subyacentes y los gatos que se lamen de forma compulsiva pueden desarrollar irritaciones que se vuelven crónicas y convertirse en cáncer. Los traumatismos físicos que dejan cicatrices en la piel pueden aumentar el riesgo de cáncer de piel en los gatos. Algunas razas de gatos son propensas a desarrollar ciertos tipos de cáncer de piel, ya que son portadoras de un gen relacionado.
El acicalamiento excesivo puede ser un signo de cáncer de piel, especialmente si se centra en una parte anormal de la piel. Sin embargo, los gatos que se acicalan excesivamente por otros motivos pueden provocar un granuloma por lamido parecido al cáncer. Por eso es importante acudir al veterinario si tienes alguna inquietud.
¿Cómo se diagnostica el cáncer de piel en gatos?
El diagnóstico del cáncer de piel suele comenzar mediante una punción aspirativa de la protuberancia o bulto. El veterinario observa las células con el microscopio para determinar si son cancerosas. Si hay signos de células cancerosas en el microscopio, o si no se puede obtener una muestra adecuada de la aspiración con aguja, es posible que el veterinario quiera realizar una biopsia quirúrgica para confirmar el diagnóstico de cáncer. Para este procedimiento, el gato deberá estar sedado.
¿Cómo se trata el cáncer de piel en gatos?
A menudo es necesaria una cirugía para extirpar el tumor. Si el cáncer está en las orejas, puede ser necesario extirpar la oreja. Esto no afectará a la audición del gato.
Además de las opciones quirúrgicas, los gatos pueden necesitar quimioterapia. Se puede recomendar radioterapia y crioterapia si la cirugía no es una opción.
La única forma completa de eliminar el cáncer es extirpar todo el tumor. Siempre existe el riesgo de que el cáncer reaparezca.
¿Cómo puedo prevenir el cáncer de piel en gatos?
Si el cáncer es hereditario o está causado por la genética, no hay mucho que se pueda hacer para prevenirlo. Puedes limitar la exposición al sol, incluso en el caso de los gatitos que solo están en interiores. Esto puede ser difícil ya que a los gatos les encanta dormir la siesta bajo los rayos del sol. Solo asegúrate de que no se excedan y de que tengan acceso a la sombra para refrescarse si tienen demasiado calor.
En el caso de los gatos sin pelo, rapados, de pelaje blanco o de pelaje fino, deben permanecer en el interior durante las horas del día en que el sol está más fuerte, normalmente entre las 10:00 y las 16:00 horas, para limitar su exposición y evitar el cáncer de piel inducido por el sol, así como las quemaduras producidas por el sol.
Mediante un diagnóstico temprano y una consulta con el veterinario, podrás determinar el mejor curso de acción para darle a tu gato la mejor calidad de vida durante el mayor tiempo posible.
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